Volt España condena las agresiones LGTBIfóbicas
Desde Volt no podemos permanecer pasivos y nos unimos a las condenas de las últimas agresiones LGTBIfóbicas acontecidas en los últimos meses, siendo estos números significativamente superiores a lo habitual.
Así, condenamos también toda aquella LGTBIfobia que se está adueñando de las instituciones de algunos Estados Miembro de la Unión Europea, siendo la lucha transnacional por los derechos del colectivo una muestra del carácter único y paneuropeo propio de nuestro movimiento.
Aumento de las agresiones LGTBIfóbicas
Aprovechando que el día 22 de julio es el Día Europeo en Memoria de las Víctimas de los Delitos de Odio, coincidiendo con los atentados del año 2011 en Oslo y Utoya en Noruega, anunciamos que participaremos en las manifestaciones organizadas por diversos colectivos LGTBIQ+ en España para reivindicar la lucha de las personas LGTBIQ+, denunciar las agresiones LGTBIfóbicas así como de cualquier otro colectivo discriminado y objetivo de los discursos de odio.
Vemos con mucha preocupación el incremento de los ataques contra miembros de diversos colectivos, tanto en España como en el resto de Europa. El auge de partidos de extrema derecha ha promovido una legitimación de los discursos de odio que es urgente atajar desde las instituciones, la política y los medios de comunicación.
Este repunte de violencia está plasmando en el último informe de la OSCE
Los datos recogidos hasta principios de 2020 reflejan que el total de delitos de odio registrados en España ascienden a 1.706 hechos, casi un 7% más que en el año anterior, entre los que destacan por razón de sexualidad y de identidad de género, de sexo y de origen.
Las campañas electorales de los últimos meses se han convertido en un mecanismo de propaganda basada en ataques hacia los menores inmigrantes, que, junto a una ola constante de bulos en las redes sociales hacia este colectivo, han conseguido que los discursos de odio sean un arma muy usada. Este discurso de odio se ha visto traducido en una explosión de violencia hacia los inmigrantes y las personas LGTBIQ+, aumentando las agresiones LGTBIfóbicas y llegando incluso al asesinato de un joven tras una paliza entre varias personas.
En el último informe de la Organización para la Seguridad y Cooperación en Europa (OSCE) de 2019, vemos como el racismo y la xenofobia encabezan la lista de los delitos de odio registrados, seguidos por el antisemitismo y los delitos cometidos por percibir a las víctimas con una orientación sexual o un género diversos.
Debemos recordar que estos datos son oficiales y que muchos países no realizan el registro, muchas veces debido a que es el propio Estado el que lo comete, y que en algunos casos no se denuncia. Rusia, por ejemplo, no registra los delitos de odio por orientación sexual o de género, al igual que países como Polonia y Hungría, entre otros.
En Volt estamos y estaremos con las víctimas
Desde Volt siempre vamos a trabajar por la igualdad social, para erradicar el odio en las instituciones y en defensa de las víctimas. Pues nacimos con el compromiso de apoyar a aquellos que sufren, dando igual su religión, origen, orientación sexual, género u otra cualidad que pueda ser usada para discriminar a cualquier persona.
Nos comprometemos a luchar contra los discursos de odio y a respetar y proteger los derechos de los colectivos tradicionalmente discriminados. Queremos una sociedad diversa e inclusiva, donde nadie se vea discriminado por su origen, género o identidad sexual.
Por ello, hemos comenzado una campaña en nuestras redes sociales donde pedimos a nuestros seguidores que nos cuenten aquellas agresiones de odio que hayan presenciado o sudrido, así como si la denunciaron y, en caso de no haberlo hecho, por qué.
Con esta campaña pretendemos visibilizar las historias de todas aquellas personas que han sufrido esta lacra, para concienciar a quien niega la realidad, así como detectar las razones por las cuales las víctimas no deciden acudir a la policía para denunciar la agresión y concretar y mejorar nuestras políticas de Igualdad Social. Sólo conociendo la realidad actual podremos poner punto y final a esta lacra.