Día Internacional de la Mujer y la Niña en la Ciencia
Según el informe “Científicas en cifras-2021”, elaborado por la Unidad de Mujeres y Ciencia (UMyC) del Ministerio de Ciencia e Innovación, el número de alumnado matriculado en la rama de ciencias ascendió a 84.008 personas (curso 2019-2020), existiendo presencia equilibrada de mujeres y hombres, aunque con un ligero retroceso en la proporción de las primeras respecto al curso 2015-2016.
Según el informe “Científicas en cifras-2021”, elaborado por la Unidad de Mujeres y Ciencia (UMyC) del Ministerio de Ciencia e Innovación, el número de alumnado matriculado en la rama de ciencias ascendió a 84.008 personas (curso 2019-2020), existiendo presencia equilibrada de mujeres y hombres, aunque con un ligero retroceso en la proporción de las primeras respecto al curso 2015-2016.
Gráfico 1
En las enseñanzas de máster, en el caso de las ciencias, con 9.827 personas, las mujeres no alcanzan el 50% del total de estudiantes, que sí alcanzaban en los estudios de grado.
Gráfico 2
Las diferencias por sexo en la elección de las ramas de enseñanza en los estudios de grado y máster se trasladan a los estudios de doctorado: En base a la clasificación del Ministerio de Universidades, las mujeres matriculadas en estudios de doctorado son el 47% en ciencias, con 13.091 personas matriculadas.
Gráfico 3
En cuanto al mercado laboral, en 2021, en España, según los últimos datos de la Estadística sobre Actividades de I+D del INE, el conjunto del personal investigador suma 154.125 personas en equivalencia a jornada completa, siendo el número de mujeres 61.262. Las investigadoras representan el 39,7% del total.
De estos datos puede apreciarse que aunque las mujeres jóvenes en España se incorporan cada vez más a la ciencia, abandonan la carrera científica en proporciones mayores que los hombres. Los sesgos de género, las dificultades en la conciliación y para que las mujeres puedan alcanzar los escalones más altos de la carrera investigadora, donde ahora solo llegan entre el 20 y el 30%, continúan siendo causas de ese abandono.
En Volt España proponemos:
Agrietar, hasta romper, el techo de cristal mediante la puesta en práctica de políticas que acaben con la falta de transparencia en la toma de decisiones, que afecta a estructuras y procesos; las prácticas institucionales que parecen neutras pero afectan negativamente las carreras de las mujeres y que implican errores en la atribución de méritos o evaluaciones; la discriminación inconsciente y el sesgo de género que es un sello identificativo del mundo científico en la evaluación de la excelencia y en los procesos de evaluación por pares; la pérdida de oportunidades y de eficiencia generados por la desigualdad, donde el sesgo de género provoca cambios en los propios contenidos de la ciencia. Porque a pesar de la legislación sobre igualdad de oportunidades, en todos los estados miembros de la UE siguen existiendo importantes brechas salariales y el género sigue siendo un factor estructural del puesto de trabajo, también en la ciencia.
La transformación de la educación en proyecto coeducativo, integrando la perspectiva de género y reforzando el contenido sobre igualdad en la formación del alumnado y profesorado en todos los niveles de educación, de forma que cuenten con la sensibilización y capacitación necesarias para erradicar estereotipos de género y fomentar vocaciones y la didáctica de las ciencias con perspectiva de género.
Mayor protagonismo de las investigadoras en el liderazgo de proyectos financiados I+D+I.
Comprender de qué forma el contexto, los espacios donde se trabaja en innovación y sus dinámicas, es facilitador o inhibidor en el fomento del Talento innovador femenino y adoptar las medidas necesarias para eliminar estos últimos.
Implantar planes de igualdad en las organizaciones, así como protocolos frente al acoso sexual y sexista.
Reestructurar los sistemas de trabajo y sociales, con el fin de conseguir una participación más equitativa de hombres y mujeres en el mercado laboral y en la vida familiar.